Un nuevo infierno.

Infancia ¿suerte o derecho? la utilización de un niño en actividades sexuales a cambio de remuneración o cualquier otra forma de retribución…es un crimen!

Hoy les hablare del tema “la prostitución infantil”.

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No es una cruel y repugnante mentira que en nuestro país la prostitución infantil es uno de los problemas más grandes en la actualidad, auque mucha gente cree que eso sólo pasa en las películas hay que afrontar la realidad, la cual es que este problema está en cada esquina de nuestro país, de nuestro estado y también de nuestra ciudad, nuestro país es una de las sedes mas importantes en el que se da una de las plagas mas repugnantes que existen. Las cifras nos dicen que en el mundo existen aprox. 10 millones de menores de 18 años dedicados a la prostitución y cada año aumenta un millón más a la cruel suma de afectados por la prostitución infantil
La explotación sexual comercial de la niñez es una violación fundamental de los derechos de la niñez. Abarca el abuso sexual por parte del adulto, y remuneración en dinero o en especie para el niño o para una tercera persona o personas. El niño(a) es tratado como objeto sexual y como mercancía. La explotación sexual comercial de la niñez es una forma de maltrato y violencia contra ésta, equivale a trabajo forzado y constituye una forma de esclavitud.

Hay que dejar en claro que la prostitución infantil no solo abarca el sexo femenino como mayormente piensa la gente también abarca al sexo masculino haciendo que en los dos casos los menores pierdan completamente su inocencia y dejando en ellos una huella de por vida que muchas veces ni con terapia permanente logran borrar y liberarse de ese trauma o curar por completo las cicatrices del alma en el mejor de los casos, porque yo les aseguro que cada persona en la audiencia ha escuchado mínimo una historia sobre algún desdichado niño que cae no por elección, cabe aclarar, en la prostitución y muestran todos los obstáculos que tienen que atravesar para salir adelante y volver a su vida de antes, pero señoras y señores hay que ver la realidad lamentablemente eso casi siempre es parte de la ficción de una historia, es triste poder saber que mas del 80% de los niños que trágicamente llegan a caer en las redes de la prostitución infantil no logran salir jamás de ella!!!.
Lo peor de todo es que la historia de la mayoría de los niños que son vendidos y tratados como objetos sexuales empezó en su hogar, se ha demostrado que en la mayoría de los casos algún familiar cercano como el tío, el abuelo o el padrastro es el que empieza a abusar sexualmente del menor acompañado de amenazas para asegurarse de que el afectado no diga nada, cuando el abusador se da cuenta de que puede ganar dinero vendiendo al menor generalmente huye con él y empieza el desagradable y traumático trabajo, pero no solo existen estos casos en los que el menor empieza a ser abusado y después vendido, también existen los casos en los que el menor es secuestrado por delincuentes callejeros o reclutadores infantiles. También hay casos en los que familias grandes con muchos hijos llegan a prostituir a uno de sus hijos(as)por razones económicas, también hay otros en los que los progenitores están en el cruel camino de la prostitución y los hijos son arrastrados a este camino de perdición.
El derecho a disfrutar la niñez y a llevar una vida productiva, gratificante y digna, se ve seriamente comprometido por la explotación sexual comercial de la niñez. La explotación sexual comercial de la niñez puede traer consecuencias serias de por vida, que amenazan en el desarrollo físico, psicológico, espiritual, moral y social de los niños y hasta la propia vida. El daño inmediato que enfrenta la niñez explotada es la violencia física por parte de aquellos que la explotan, algunos llamados coloquialmente: "chulos" , "madams" que no son más que traficantes además de los clientes existen isten muchos relatos estremecedores contados por niñas y niños que han sido abofeteados, pateados , golpeados hasta dejarlos inconscientes, quemados con cigarrillos, y violados por negarse a trabajar.
Niños y niñas participan igualmente en la industria del sexo. La pobreza de las víctimas y el lucro proveniente de esta actividad son las razones fundamentales por las cuales florece este ejercicio. Se calcula que a escala mundial la explotación sexual de la niñez en todas sus variantes genera anualmente 20 mil millones de dólares, de los cuales 5 mil millones son atribuidos a la prostitución infantil. En algunos países pueden encontrarse niños menores de 10 años que han sido prostituidos. Algunos tienen entre cinco y diez relaciones cada día. Las consecuencias son predecibles.
La prostitución infantil es un retrato más de las enfermedades sociales y de las quiebras humanas. El destino de la mayoría de estas niñas y de los jóvenes víctimas de esta plaga es patético: enfermar o morir. No existen estudios que documenten cuántos logran escapar de ese infierno para adaptarse a la comunidad, pero seguramente son pocos. Los niños no son responsables de "su" prostitución. Los gobiernos y sus brazos: -pobreza, injusticia, sobrepoblación, falta de educación- son los culpables.
Existen muchos individuos comprometidos que trabajan incansablemente alrededor del mundo en un esfuerzo por combatir la explotación sexual comercial de la niñez. Pueden trabajar de manera individual o como miembros de una organización, en una oficina gubernamental, en un templo de aldea, pueden dedicarse a buscar información sobre sitios pornográficos en la Internet o recorrer las calles en búsqueda de niños (as) con necesidad de albergue. Independientemente de quiénes son o de lo que hacen, todos estos individuos comparten un objetivo común y la creencia de que la situación de la niñez que sufre explotación sexual, no es desesperanzadora.
Por esa razón yo les exhorto a que reflexionemos en este triste y desgarrador problema, que tomemos conciencia y hagamos algo por ayudar, todos podemos hacer algo, denunciando, colaborando con las asociaciones que han tomado en sus manos este problema, que no seamos indiferentes sin querer ver, ni oír porque resulta incómodo, respetemos a la niñez que es el futuro de nuestro país y del mundo porque ellos también son hijos de Dios y merecen una vida mejor
Muchas gracias.